No hay nada que me acabe de gustar. No sé qué elegir, no me acaba de convencer nada.
Tengo opciones pero ninguna me convence.
Me escribía esto una lectora hace un tiempo. ¿Qué puedes hacer cuando nada te acaba de gustar? ¿Cuando ninguna solución te parece buena?
Te lo cuento hoy. Sigue leyendo/escuchando.
Escucha del audio aquí –> Qué hacer cuando nada te convence
Puede que lo que pase es que no sepas lo que quieres y por eso parece que nada te convence.
Puede que estés buscando la solución/decisión/elección perfecta. Algo que lo contemple todo, que te llene, que sea exactamente lo que tú quieres en todos los aspectos.
Muchas veces he comentado que no puedes exigirle tanto a tu profesión o a una sola área de tu vida. Tiene que ser un compendio, que entre todas las áreas de tu vida tus necesidades queden cubiertas.
Puede que te hayas aferrado a «glorias pasadas». Es que lo de antes era tan bueno que ahora…
Pero si tan bueno era no lo habrías dejado. Si de verdad hubiera cumplido tus necesidades en este momento…
También puede ser que estés cómoda en tu situación actual y eso te mantenga estancada porque no hay razón para moverse, en realidad.
Hay muchas razones por las que puedes estar en esa situación de desgana y de no encontrar algo que te convenza.
Y una solución solo.
Empezar a moverte.
Si llevas ya mucho tiempo estancada porque ninguna opción es buena y nada te convence, tienes dos opciones básicas:
- Averiguas qué quieres.
- Pruebas algo, empiezas a moverte y a partir de ahí vas afinando y abriendo puertas y mostrándote atenta a oportunidades.
La dirección de un coche se corrige en marcha, no cuando está aparcado. Empieza a moverte.
Porque lo único que no es opción es seguir como estás, esperando indefinidamente. Llega el momento de hacer algo, algo distinto.
-Puedes aprender que quieres y por donde tirar. Te ayudo aquí.
-O ir tirando y averiguando por el camino por dónde seguir o no.
¿Y si ya sabes lo que quieres pero no sale nada?
Sigues aprendiendo sobre ti, sigues probando cosas que te llamen la atención, sigues buscando; porque la alternativa es quedarte de brazos cruzados y eso no suele llevar a nada.
Sigue jugando y disfruta mientras de cosas que te hagan sentir viva.
Cuéntame, ¿por dónde vas a empezar a moverte?
