El tema de hacer cambios para conseguir tus objetivos me parece muy interesante.

Hay ciertos cambios que cuesta mucho hacer y por mucho que apliques todas las técnicas que conoces para conseguir objetivos, a veces parece imposible.

Hasta ahora ya he hablado sobre tres puntos importantísimos a la hora de hacer cambios:

>> Escucha este artículo aquí –> 3 maneras de hacer cambios para lograr tus objetivos

 

1. Saber lo que quieres
2. Diseñar objetivos SMART
3. Entender los principales errores (no planificar imprevistos, etc)

 

Esto por sí solo ya es suficiente para que empieces a hacer cambios y tengas más probabilidades de conseguir tus objetivos. Pero ¿y cuando lo haces todo y aun así no consigues lo que quieres?

Es cierto que en muchos casos la causa es uno de los errores que menciono antes: que en realidad no quieres lo que dices que quieres, que no eres realista, que no tienes en cuenta tu situación actual y posibles imprevistos, etc; pero otras veces es cuestión del método que utilizas.

 

En el artículo anterior hablé de una de las principales razones por las que a veces no logras conseguir tus objetivos: que lo que te propones requiere más pasos de los que parece.

Siguiendo con ese tema, cuando no eres capaz de conseguir algo en particular y de verdad quieres un cambio, ¿qué puedes hacer, aparte de asegurarte de que sea un objetivo bien planteado?

Como explica Maria Brilaki en su libro “Surprisingly…Unstuck: Rewire your brain to exercise more, eat right, and truly enjoy doing so”, hay (al menos) tres métodos distintos para hacer cambios:

 

1. Plantearte un cambio radical.

Esto es lo más difícil, requiere mucho esfuerzo, perseverancia y voluntad. Normalmente se realiza en un período de tiempo relativamente corto por lo que obtienes resultados rápidos y la admiración de los que te rodean.

No es imposible y a mucha gente le motiva el desafío, pero es muy difícil y para muchos supone una alta probabilidad de fracaso.

Rápidamente te ves incapaz, abandonas y dudas de ti misma. Un ejemplo sería dejar de fumar «a palo seco».

 

2. Hacer pequeños cambios.

Esto es lo más frecuente y funciona muy bien para muchas personas. Por ejemplo, plantearte escribir una hora al día si quieres escribir una novela, o hacer ejercicio 30 minutos al día, tres días a la semana.

Es más realista que el método anterior y puede dar buenos resultados aunque se tarde un poco más (al fin y al cabo lo que importa no es el tiempo sino conseguir tu objetivo.)

Sin embargo, para algunas personas esto tampoco es suficiente. ¿Por qué?

Como mencioné en el artículo anterior, porque esos pequeños pasos, no son tan pequeños.

Hacer ejercicio 30 minutos al día cuando no has hecho nada hasta ahora supone: cambiarte de ropa, ducharte, ir y venir del gimnasio, hacer el ejercicio en sí…

Mucho más de lo que parece, por eso puede que tu no te pongas en marcha, porque ese pequeño paso requiere muchas cosas.

Lo que nos lleva entonces a la tercera estrategia.

 

3. Hacer cambios ridículamente pequeños, diminutos, que no te supongan ningún esfuerzo.

Como por ejemplo, simplemente ponerte las zapatillas de deporte nada más levantarte o, como le decía a una de mis clientas que se había propuesto beber dos litros de agua al día, poner una botella de agua en tu mesa.

Nada más, ni tienes que correr, ni tienes que beber si no quieres.

Durante una semana o unos días el único cambio al que te tienes que comprometer es tener la botella en la mesa.

Empiezas por algo muy sencillo y a los pocos días das un paso más y te propones algo igual de fácil, por ejemplo, beber un sorbo de agua nada más sentarte a la mesa. Solo un sorbo y solo en ese momento.

Que luego bebes más, muy bien, pero tu compromiso es solo ese. Fácil, ¿no?

Y también efectivo porque sin apenas esfuerzo te irás acostumbrando al cambio. 

Y ¿qué consigues con pasos tan minúsculos?

 

  1. Ponerte en marcha ya. Se acabó seguir posponiendo, lo que te has propuesto es tan sencillo que no hay razón para no empezar ya mismo.
  2. No desanimarte. Al contrario, estarás contenta porque vas consiguiendo lo que te propones.
  3. Crear un nuevo hábito, porque al final lo harás automáticamente, lo incorporarás a tu rutina, y son los hábitos los que provocan el cambio.
  4. Conseguir tu objetivo.

 

Tardarás mas que con otro método, sí, pero lo importante es que lo conseguirás y sin agobios.

La cuestión es ponerte las cosas fáciles y dejar de pensar que tienes que intentarlo más. Además, un punto clave de este método es plantearte sólo objetivos a corto plazo.

Esto va en contra de todo lo que decimos habitualmente, pero piénsalo.

Si durante media vida te has planteado algo en particular y has abandonado todas las veces, ¿no merece la pena probar algo distinto?

En este caso, en lugar de objetivos a medio o largo plazo (y con eso me refiero a un período de tiempo mayor de dos semanas) lo que vas a hacer es, en primer lugar, tener muy claro lo que quieres conseguir (ej: hacer más ejercicio para estar en forma, controlar mis gastos, cambiar de trabajo, dormir más) y, en segundo lugar, proponerte pasos diminutos cada semana.

Pruébalo con los objetivos que mas se te han resistido hasta ahora y es probable que en menos de lo que esperas ya hayas hecho cambios.

 

Lo importante es que sepas que hay distintas formas de hacer cambios y que vayas probando, sabiendo que puedes cambiar de método en cualquier momento si no te da resultados.

Puede que determinados objetivos los hayas conseguido toda la vida de una manera particular pero que con otros no haya forma, ahora ya sabes que hay más alternativas.

No hay un método mágico que funcione en todos los casos y circunstancias.

Y recuerda, aunque la mayoría de las personas piensan que necesitan más motivación o fuerza de voluntad, lo que de verdad se necesita es ponerte las cosas fáciles, tener recordatorios ya sean visuales (la botella de agua), auditivos o de otro tipo (quedar con una amiga para ir al gimnasio) y, por supuesto, una recompensa (evitar algo malo o recibir algo bueno).

 

¿Qué te parece? ¿Cuál vas a probar?

Déjame tu comentario abajo y no olvides suscribirte a mi boletín semanal gratuito para recibir el siguiente artículo directamente en tu correo.

email

Y TU, ¿QUE OPINAS? - 18 COMENTARIOS

Comentarios

  1. Natalia dice

    Aida este articulo es diferente al que yo he recibido en mi correo! Ha debido de haber algún error al enviarlo.

    Gracias por tus artículos.

  2. rhaisadhirley dice

    hola aida muchas gracias por el boletin que me enviaste …me ha sido de mucha ayuda como joven que esta preparandose a emprender grandes retos en mi vida laboral primero debo hacerlo parte de mi vida como habito…no tambien eso si… cambiar estos buenos habitos por los malos que debo desterarlos…para cambiar los resultdos de mis acciones, y ser el lider de emprendimiento. desearia profundizar este tema asi , orientarlo a los pasos sabios del lider jefe del mañana! gracias..!!!atte.rhaisa

  3. katty dice

    buenas noches soy katty quisiera que por favor me ayudaras a no ser tan indecisa,me están ofreciendo empleo en dos empresas distintas pero nosé cuál de las dos quedarme, una es pública y la otra es privada, por favor ayudeme, gracias.-por el comentario que usted escribió, decidí a escribirle está situación que me aqueja,

  4. Ana Mª Valenzuela dice

    Me ha gustado tu tercera vía, aunque, impaciente como soy, más que incluir un cambio a la semana, añadiría uno al día 😀
    Por cierto, yo, a los objetivos SMART, los llamo «metaables», porque se pueden «metaar» (Medible, Específico, Temporalizable, Alcanzable, Autodependiente y Realista).
    Este artículo, junto con otro que he leído hoy sobre el peligro de postergar y cómo nos saboteamos pensando lo que pensamos mientras postergamos, me han dejado con más ganas todavía de materializar mis metas.

  5. Viviana dice

    Hola! pues hace un par de semanas hice una combinación de los tres creo. Lo primero hice un cronograma lo más realialista que pude teniendo en cuenta tiempos de desplazamiento. Lo otro son las actividades que quiero hacer de ocio, como aprender mecanografía y dedicar tiempo a jardineria, televisión pensando el los programas que realmente me gustan ver. Luego, puse un recordatorio en mi pc para cada actividad en general. y cuando me dice ya, voy cerrando lo que estoy haciendo y me levanto a hacerlo. Habia descuidado mis hábitos de limpieza de mi cuarto y ropa, y comencé a limpiar mi cuarto hace 15 días, no terminé porque saqué absolutamente todo, lo dejé ahí pues el siguiente fin de semana podía continuar según mi cronograma, y así lo hice y ahora etsoy muy feliz que mi cuarto luce como me gusta! También me presiono para ir al gimnasio pero si es un mal día lo reemplazo por yoga, quiero estudiar ingles pero si estoy concentrada buscando estudiar entonces termino eso y mañana no le dedico tiempo a buscar y si a mi inglés. Llevo dos semanas y esta funcionando, me siento contenta con la rutina. Pero aun me falta hacer las cosas «importantes» pero estoy haciendo las simples y con disciplina podré animarme a hacer las trascendentales.

  6. Maria dice

    Hi Aida!

    I just read your article via Google Translate! Thanks a lot for spreading the message on the different levels of change we can go for. All 3 work but they are different animals to start with.

    One small note about the different levels of change. Anything that takes less than 1 minute to complete is ridiculously small. Anything that takes more than 1 minute is either small or radical. Now the line between small and radical is blurry, and it really depends on the person…

    For example, for an injured professional athlete who used to work out for 3 hours every day and now wants to get back on track, 30 minutes is probably small.

    But for a sedentary person 30 minutes every day is probably radical.

    Ok, time to stop the analysis. Thanks again for your article and hope to keep in touch!

  7. Karla Skoles dice

    Gracias, gracias, gracias, gracias Aida, es super intersante el artículo.
    Viviana, me has dado el ánimo extraordinario…yo hice mi SEMANARIO y con tu ejemplo me estás dando las claves que requería.
    Un abrazo a ambas y mil veces más, GRACIAS!!!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*